¿De quién nos enamoramos?

El enamoramiento ocurre cuando encontramos a alguien que nos ayuda a crecer, a realizar nuevas posibilidades. A ir en una dirección que responde a nuestras exigencias internas, a los empujes que la sociedad ejercita sobre nosotros.
El hecho de que la persona amada se parezca a nuestra madre, padre, a nuestra tía, o a cualquier otra imagen infantil, es sólo el medio el instrumento por el que se manifiesta el impulso vital.
Si hemos soñado, si hemos amado y admirado a un actor o una actriz famosa, la persona de la que nos enamoramos nos la recordará.Pero la elegimos a ella porque llega en el momento oportuno, porque, al menos en el plano simbólico, nos parece idónea para resolver nuestro problema existencial.
Cuando una persona está enamorada, recibe de la otra un flujo increíble de informaciones. Es una vida entera, es el mundo visto desde otra vida que se vuelca dentro de ella.una experiencia similar pueden tenerla sólo los padres siguiendo a los hijos que crecen, participando en sus juegos, compartiendo sus gustos y sus modas musicales.
En efecto los padres siguen siendo jóvenes con los hijos. Pero todo esto se desarrolla en el curso de los años. En el enamoramiento, en cambio, la irrupción de la vida de otra persona ocurre incluso en pocos meses. Es como abrirse de un nuevo universo, porque cada ser humano es un universo.
Por eso amar significa renacer también en este sentido, en que nos convertimos en otro, nos desdoblamos,tenemos una segunda vida paralela a la nuestra.